El alto consumo energético de la IA será uno de los grandes desafíos del futuro

A medida que la crisis climática se intensifica, las actividades humanas agravan cada vez más sus consecuencias. Un ejemplo alarmante es el uso de herramientas de inteligencia artificial (IA), que podrían estar contribuyendo a la sobrecarga de los sistemas eléctricos. Según un informe de Bloomberg, los servidores de IA ya están causando serios problemas en las infraestructuras energéticas a nivel mundial.

Los centros de datos especializados en IA consumen más electricidad que naciones como Italia, Taiwán, Australia y España. Este alto consumo energético no solo incrementa la demanda de electricidad, sino que también obliga a construir más centros de procesamiento. Estas nuevas instalaciones a menudo requieren deforestación y la reubicación de actividades comerciales esenciales, como la ganadería.

Un informe de Reuters revela que el uso de IA consume en promedio diez veces más energía que una búsqueda común en Google. Por ejemplo, la nueva función "AI Overviews" de Google consume 3 vatios por hora, mientras que una búsqueda estándar consume solo 0.3 vatios, equivalentes al consumo de una bombilla LED por una hora. Esta mayor demanda energética pone una presión adicional sobre los sistemas eléctricos, lo que podría llevar a colapsos durante olas de calor intensas.

A pesar de los esfuerzos de gigantes tecnológicos como Amazon, Microsoft y Google por implementar soluciones energéticamente eficientes, la realidad es que satisfacer la creciente demanda de IA podría requerir fuentes de energía alternativas, como la nuclear. Sin embargo, estos nuevos enfoques energéticos podrían alejar a estas empresas de sus compromisos de reducción de emisiones, planteando un dilema significativo en la lucha contra el cambio climático.