El papel crucial de la tecnología como apoyo en la diversidad funcional

La revolución digital ha traído consigo avances notables, pero también ha evidenciado la persistente brecha de inclusión que enfrentan las personas con discapacidad en nuestra sociedad. A medida que la tecnología se convierte en un pilar fundamental en nuestras vidas, aquellos con discapacidades se encuentran con obstáculos significativos para participar plenamente en este entorno dinámico.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) informa que más de mil millones de personas en todo el mundo viven con alguna discapacidad. Además, un informe de la fundación Adecco revela que el 32% de las personas enfrenta problemas de accesibilidad a la tecnología debido a la falta de adaptabilidad a su discapacidad, y el 42% lucha por comprender la funcionalidad tecnológica debido a la falta de énfasis en su educación.

Ante esta realidad, surge una imperante necesidad de un doble esfuerzo: preparar a las personas con discapacidad en el uso de la tecnología y desarrollar soluciones tecnológicas que eliminen las barreras existentes, garantizando una participación equitativa en la era digital.

En este contexto, la Fundación Romper Barreras se destaca por su trabajo en fomentar y promover el uso de la tecnología para superar obstáculos relacionados con las discapacidades. “Buscamos democratizar el acceso a la tecnología de apoyo. No solo por el lado de los costos, sino que más personas conozcan lo que es esta tecnología y cómo funciona, tanto quienes tienen la discapacidad como el entorno en general”, explica la licenciada Ainhoa Moran, miembro del patronato de la Fundación Romper Barreras.

No obstante, persisten desafíos significativos, como el escaso apoyo de la administración pública, los costos asociados y, crucialmente, la falta de interés de los medios en abordar la problemática de las discapacidades. Superar estos obstáculos requerirá un enfoque integral que abarque desde la infraestructura tecnológica hasta la educación y la concientización social.