¿Las pantallas afectan el desarrollo del lenguaje en los niños?
Un estudio realizado por Zimmerman y Christakis sugiere que la exposición a pantallas en niños menores de dos años podría tener efectos negativos mínimos.
Aprender a hablar es una de las habilidades más importantes de los seres humanos.El desarrollo lingüístico de los más pequeños se ve influenciado por una red compleja de interacciones que involucra miradas, gestos, palabras y movimientos corporales proporcionados por las figuras de crianza. ¿Cómo afecta esta dinámica cuando las pantallas toman un papel central en estas interacciones?
Por una parte, la Academia Americana de Pediatría ha recomendado que se evite la exposición a pantallas antes de los dos años debido a las posibles consecuencias negativas en el desarrollo cognitivo y lingüístico en los niños. Sin embargo, en un estudio llevado a cabo por Zimmerman y Christakis, se sugiere que la exposición a pantallas en niños menores de dos años podría tener efectos negativos, pero estos efectos son de magnitud insignificante, planteando así un debate sobre la dimensión real de estas consecuencias.
En la actual era, el auge de teléfonos inteligentes, tabletas y videoconsolas ha generado la necesidad de considerar cómo estas pantallas se integran en las rutinas diarias de las familias y las escuelas, y cómo afecta el desarrollo lingüístico en los más jóvenes, ya sea de manera positiva o negativa.
Hay datos que sugieren que un uso excesivo de pantallas puede impactar en las habilidades lingüísticas de los niños. Esto se podría atribuir a una disminución en la interacción social, donde las pantallas actúan como sustitutos de estímulos de alta calidad necesarios para el desarrollo del pequeño. Sin embargo, el efecto general es mínimo, y es difícil determinar si estos resultados son causados exclusivamente por el tiempo de exposición a las pantallas.
Por otra parte, existen investigaciones que evidencian una mayor exposición a las pantallas en niños de niveles socioeconómicos más bajos. Esto plantea la pregunta de si los retrasos en el desarrollo del lenguaje en ciertas poblaciones están realmente asociadas a la exposición a las pantallas o si están más relacionadas con deficiencias en la interacción social, que los dispositivos intentan suplir.
Podemos decir entonces que el impacto de las pantallas en el desarrollo del lenguaje infantil es un tema complejo y multifactorial. En él influyen multitud de factores como la cantidad de tiempo de exposición, la calidad del contenido y el nivel sociocultural de las familias. Es fundamental abordar su estudio de manera exhaustiva y analítica, con el propósito de potenciar sus ventajas y reducir cualquier efecto negativo que pueda ocasionar.